jueves, 19 de noviembre de 2015

PRINCIPALES FUENTES DE PROBLEMAS EN LA RELACIÓN DE PAREJA

¿Discutes mucho con tu pareja? ¿no discutes absolutamente nada? En ambos casos, seguro que hay cosas que mejorar. Convivir o compenetrarse con otra persona lleva inevitablemente a conflictos, más o menos graves, que hay que saber solucionar. Y es que una pareja sana no es aquella que nunca discute, sino la que resuelve sus disputas de forma efectiva y asertiva.

Una causa de conflicto puede ser que la relación ya no tenga el valor reforzante que tenía al principio para alguno de los miembros. Es decir, ya no vale la pena. Puede que esto suceda por diversas razones, como la desaparición del efecto novedad, por saciación o por cuestiones personales de alguno de los miembros.

Otra causa de conflicto que predice la disolución de la pareja es la frustración de expectativas. Cuando dos personas comienzan una relación de pareja se crean, cada una de ellas, unas expectativas no reales. Estas expectativas provienen de la sobregeneralización de situaciones en la que ambos ya han interactuado (espero que mi pareja trate con cariño a nuestro futuro hijo porque le he visto interactuar de forma cariñosa con su sobrino de tres años) y de la educación que cada miembro haya recibido de su familia de origen (en casa de uno se deja la tapa de váter bajada de toda la vida y en casa del otro, la tapa se queda como esté, por ejemplo). No hay una opción mejor que otra, solo hay que aprender a detectar los puntos de discrepancia y aprender a negociar soluciones.

La pareja siempre debe ser la prioridad; esto no significa dejarlo todo por tu pareja, sino que la tengas en cuenta en todo lo que hagas. Si aparecen actividades u objetos reforzantes sólo para uno de los miembros de la pareja y se deja de lado al otro (trabajo, aficiones, hijos, amantes, adicciones…), aparecerán los conflictos. La soledad de uno de los miembros, tener vidas paralelas ajenas a la pareja y resolver los problemas solo, sin contar con el otro son variables que predicen la disolución de la pareja.


Muchos de los grandes conflictos que tiene una pareja han empezado poco a poco y se han cronificado porque se ha normalizado esa forma de interacción. No menosprecies un problema de pareja porque causa mucho sufrimiento e influye en el día a día de la persona; hay expertos que os pueden ayudar dándoos herramientas de solución de problemas que podréis ir aplicando en vuestra vida cotidiana.

XXX
Leire